Bajo mi punto de vista, emplear clases virtuales tiene muchas ventajas. Principalmente mejorar la organización y simplificar el trabajo, ahorrar miles de copias en papel, establecer un nuevo canal de comunicación con el docente, desarrollar las habilidades digitales, y sobre todo extender el aprendizaje fuera del aula. En este vídeo de 2 minutos Google expone experiencias reales. ¿Te animas a verlo?
Google publica este vídeo con motivo de haber superado la cifra de 10 millones de usuarios activos de su sistema. Hay otras opciones en el mercado, más potentes y con más funcionalidades (como Moodle) pero más complicadas de gestionar para el usuario medio. En cualquier caso, todas las opciones son positivas, siempre que contribuyan al mejorar el aprendizaje del alumno.
Y como siempre, reitero que no es imprescindible disponer de modelos 1:1 para utilizar estas herramientas. Se puede aprovechar los recursos de casa de cada alumno, e incluso los del colegio (aula informática). Con entusiasmo, voluntad, y un poco de esfuerzo, ningún colegio debería renunciar a trabajar de modo colaborativo y acompañar las nuevas metodologías didácticas con la tecnología disponible.
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